CASTOR. Más o menos en todos los pueblos de España. Diré que las sopas de ajo bien calentitas y con un pimentón picante entraban de maravilla, venían en pucheros de barro. Tengo que decir que las sopas calentitas nos sentaban muy bien. El frescor de la mañana era latente. desde las 7 hasta las 9 pasábamos frío. pese a que era verano, pero teníamos que estar allí para que las vacas no marcharan. Cierto que no eran todos los días y yo lo aprovechaba para ir a pescar. El torrezno bien dorado nos sabía
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En mi pueblo Mesegar de Corneja (
Ávila) en
verano nos levantábamos antes del ser de dia tomabamos un "cacho" y a las 9 desayunabamos a veces sopas de ajo y/o normalmente "patatas revolconas" cocidas en puchero de barro peladas, se echaban en la cazuela se machacaban rerevueltas con pimentón de la Vera un buen plato y después un torrezno óh dos recien frito el tocino.
EN VERANO:
cada un@ atendia a lo suyo, las
mujeres normalmente en la cocina de leña, los muchachos sin
escuela al ganado y los
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