Los militares africanistas y sus colaboradores que...

Los militares africanistas y sus colaboradores que se rebelaron (dejaron de ser militares para ser rebeldes), quedando después Franco (Paca la culona, según Queipo de Llano cuando era su profesor en sus estudios militares), hacían lo que sabían: MATAR, hacer sufrir, no eran estadistas ni economistas. Gracias a ello, los españoles tuvieron que coger su maleta de cartón o madera, atada con una cuerda, acompañados de su des conocimiento del idioma alemán o francés (incluso algunos mal conocían el español) y tuvieron que optar por el sacrificio de emigrar en esas condiciones, huyendo de la miseria económica quer se vivía en España, además de la miseria cultural, sanitaria, etc. etc..
La publicidad franquista decía: ¡El milagro español ¡, cuando debía haber dicho: el sacrificio del pueblo español, provocado por unos cuantos rebeldes armados, ayudados por los fascistas Hitler y Mussolini
No agradeceremos bastante los españoles a todos aquellos emigrantes que paliaron las pésimas condiciones de vida de la población en general
Cuanto mayor era la miseria de la población española, mayor era la curva de la barriga del general (véase hemeroteca y filmoteca) así como de sus colaboradores religiosos (curas y obispos), cuya redondez ventral se asemejaba más a la de una embarazada que a la de un varón disfrazado de bombón de luto y que, cuando levantaban el brazo para hacer el saludo fascista, se les levantaba la sotana dándoles un aspecto grotesto.
Había, entre los clérigos, algunas excepciones, como el Cardenal Tarancón (por ello, la derecha acuñó la frase: "Tarancón al paredón", demostrando que lo único que sabían era: MATAR AL QUE DISCREPABA, LLEVARA O NO LLEVARA RAZÓN"
La curva ventral, desde 1.939 y sucesivos, aumentó.
En los últimos años de la Dictadura, los ministros del Dictador Rebelde, Francisco Franco se atrevieron a decirle: General, no tenemos divisas más que para una semana, con una economía en quiebra prácticamente.
Así que, muy a su pesar, tuvieron que promover acciones de apertura económica y muy pocas políticas, que permitieran medio respirar.
Aun así, en los primeros años de la Democaria, Adolfo Suárez, buen estadista, tuvo que hacer frente a una economía española incapaz de colocarse a la altura de los países democráticos, con una inflación de aproximadamente el 23 por ciento. ¡veintitrés por ciento ¡. Era una economía propia de países bananeros.
Adolfo Suárez tuvo que hacer reformas, impopulares, consiguiendo colocar la inflación al 14 por ciento. Muy meritorio.
Después, Felipe González, culminó el proceso, más reformas (muy impopulares) para dejar la inflación en el 3 por ciento aproximadamente, lo que allanó el camino para entrar en Europa.
Después vendrían los fondos de cohesión procedentes de Europa y los tipos de interés bajos (pero marcados ya por Europa, no por Aznar) y, los frutos de la entrada en Europa, los recogería el gobierno de la derecha, de Aznar, que, acuñó la frase: "España va bien" (¿Para quiénes iba España bien? Para los especuladores, defraudadores que se aseguraron los millones ¿Donde están los billetes de 500 euros? Pues con toda probabilidad, dinero negro en manos de estos defraudadores y especuladores, o en los paraísos fiscales.
Ellos se llevaron los millones y aquí nos dejaron los MILLONES DE PARADOS.
Ya se sabe, la derecha y su defensa del libre mercado, con nula intervención del Estado, para eludir cualquier tipo de control y asegurarse los millones a costa de la miseria del pueblo. Pero gran parte del pueblo se para a analizar los intereses que están en juego. Están muy ocupados con el fútbol y, ya se sabe, camarón que se duerme, se lo lleva la corriente. Luego, con echarle la culpa a uno que pasaba por allí, tienen bastante,