No es verdad que el tema Mascarillas no estuviera sobre...

Al menos Elsa García de Blas dice la verdad sobre lo ocurrido. "El día no podía ser más señalado. La víspera del aniversario de la noche de los cuchillos largos del PP, en la que los barones, reunidos durante cuatro horas en la sede del partido en la madrileña calle de Génova, acabaron con la carrera política de Pablo Casado por su guerra abierta con Isabel Díaz Ayuso". Por su guerra abierta con Ayuso, nada que ver con contratos ni corrupción. Pero poco dura la alegría en la casa del pobre. "Isabel Díaz Ayuso, que salió victoriosa en la guerra interna, no olvida ni perdona el intento de Casado de destruir su carrera política al hacer pública la comisión que cobró su hermano por la venta de mascarillas al Gobierno de Madrid en plena pandemia". Mientes, Elsa. Casado quiso destruir a Ayuso por celos, y la batalla era la presidencia del partido en Madrid. Sobre la comidita de marras, "fuentes de su entorno han restado importancia a la cita de los dos líderes. "Ni fu ni fa", afirman con cierto desdén en el equipo de la presidenta madrileña, informa Juan José Mateo".

"Pedro Sánchez visita Kiev para reunirse con Zelenski". Un día después de prohibir a Feijóo ir a Letonia a visitar a las tropas. Chincha rabiña, yo soy el presi y voy donde quiero y tu no. Este es el nivel del Gobierno en cuyas manos está España.

No es verdad que el tema Mascarillas no estuviera sobre la mesa. Era el tema central. Casado acusó a Ayuso de corrupción sin las pruebas necesarias, hecho que en Madrid archivó el Fiscal y que sigue en la Justicia europea.