Todos están convencidos de que no habrá unas terceras...

Todos están convencidos de que no habrá unas terceras elecciones, aunque nadie ha explicado por qué no. Empieza la campaña del “desbloqueo” con los principales partidos enrocados en sus líneas rojas y vetos cruzados, y los datos de los sondeos les reafirman en su posición. El PP, que parte como favorito, sigue convencido de que la única salida es una gran coalición encabezada por Mariano Rajoy. Este partido, igual que Unidos Podemos, ha apostado por una polarización que arrincone al PSOE y relegue a Ciudadanos a la irrelevancia.

Mariano Rajoy presumió en el inicio de la campaña electoral, en Madrid, de que su partido va a protagonizar una campaña limpia y constructiva y aseguró a los suyos que el único voto seguro era al PP. Pedro Sánchez, por otro lado, apeló a los votantes socialistas de “corazón” y aseguró que el futuro no está escrito. “España necesita una etapa de moderación frente al riesgo del extremismo”. La frase, repetida una y otra vez por Rajoy, es el mantra de su campaña. El PP sostiene de cara al 26-J la misma posición de partida que su candidato expresó el 21 de diciembre ante el comité ejecutivo de su partido. El primer lugar que le pronostican los sondeos le sirve para asegurar su derecho a volver a gobernar, por ser la formación más votada y con más escaños. Sigue defendiendo, aun así, que ha llegado el momento de importar en España un Gobierno de amplia mayoría. Ofrece al PSOE la gran coalición mientras alerta de la tentación de los socialistas de pactar con Podemos, a los que el PP tacha de radicales.