Hablemos claro. Lo de las residencias tiene tela. Dar asistencia a un viejo cuesta muy caro, se precisan unas instalaciones adecuadas y mucho personal. Hagamos historia. Asta los años ochenta, las monjas y frailes de distintas congregaciones, regentaban asilos, manicomios y algunos hospitales, y en los hospitales públicos tenían presencia con monjas enfermeras. Su preparación dejaba mucho que desear, pero salían baratas. Referente a los asilos, ahora llamadas residencias; Había menos numero de viejos y eran menos viejos que ahora, En su mayor parte eran cuidados en casa, y a los asilos iban los que carecían de recursos economices y se encontraban solos. Los asilos eran horrendos. Ya con el gobierno de UCD, y sobre todo con la llegada de los socialistas, se construyen modernas residencias y toman para bien el relevo a los tradicionales asilos, regentados por religiosos con escasa preparación. Estas residencias eran como hoteles y creo que en la actualidad, se encargan de las personas con un grado de invalidez muy alto, y no son gestionadas directamente por la SS. Aumenta considerablemente el numero de viejos, las altas reivindicaciones económicas, y condiciones de trabajo en un principio, la ideología de la derecha y la avalancha de necesitados, propician que el sector privado huela el negocio y entre en el como si de cualquier otro negocio se tratara. Y aquí, hay que decirlo todo, en este negocio tambien entra la corrupción. Hay residencias cuyo precio es prohibitivo para la mayoría de los jubilados. Todos los ayuntamientos de unos dos mil habitantes de la España vacía, tienen o quieren una residencia, da lustre al pueblo y siempre encargarse de los mayores es buena propaganda para el que manda. También a estas residencias acuden gentes de otros lugares porque son mas baratas. Son en algunos casos preparadas en edificios en desuso, concertadas con la SS y los propios ayuntamientos.
En las antiguas residencias las exigencias de los trabajadores hacía que se supiera las condiciones de las mismas. Eso no es posible ahora sobre todo en zonas con fuerte paro, ya que es muy fácil perder el empleo. Y todo lo que se sabe es por inspecciones que hacen a veces los propios ayuntamientos, que en muchos casos son juez y parte.
Y de un inspector se sabe donde va que día y a que hora, y la residencia se prepara para la ocasión. Se han dado episodios desagradables en este tipo de residencias, y a modo de disculpas y parodiando a un coche que se estrella, se dice que ha pasado la inspección.
Por otra parte está la familia. Cuando se trata de una residencia de personas válidas, son los propios residentes los que exigen condiciones decentes. Pero cuando se trata de personas no validas, la familia se desentiende un tanto, hay que tener en cuenta que son residencias "baratas" donde van los menos favorecidos, cuyas familias tambien son de las menos favorecidas, y en la mayoría de los casos bastante tienen con hacer frente a sus necesidades. Total que el abuelo esta allí, donde deja de ser una carga mas para la familia.
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