El "fondo de reptiles", la partida 31L de la Consejería de Empleo de la Junta, Andalucía

El "fondo de reptiles", la partida 31L de la Consejería de Empleo de la Junta de Andalucía, que según dicen iba a servir para ayudar a la jubilación a trabajadores afectados por expedientes de regulación de empleo (ERE), se ha usado para muchas otras cosas, desde colocar intrusos en los ERE y enriquecer a familiares y amigos socialistas de la Sierra Norte de Sevilla y otras provincias a vivir grandes noches de copas y coca y enriquecer a chóferes. En esta línea, no extraña nada que con ese mismo dinero Beatriz Pérez Martín, hija de Emilio Pérez Ruiz, un ex andalucista reconvertido en intermediario del PSOE y hermana de la que fue delegada autonómica de Medio Ambiente en Sevilla desde mayo de 2004 hasta abril de 2010, Pilar Pérez Martín. haya creado un portal en Internet para localizaciones y decorados para rodajes cinematográficos y publicitarios en Andalucía. Producciones Barataria SL, la empresa de Pérez Martín, fue agraciada con este tipo de subvenciones.

Según ABC, a finales de 2003, el exdirector general de Trabajo de la Junta Francisco Javier Guerrero, el imputado estrella en el fraude de los ERE, le concedió una ayuda directa de 210.354 euros por «las inversiones hechas en modernización», según dice la resolución. La aadministradora única de Producciones Barataria, SL resultó ser Beatriz Pérez, hermana de la exalto cargo de la Junta. Como es costumbre, recuérdese el caso de la quesería, dejó de tener actividad en torno a 2007, tres años después de cobrar los fondos públicos.

Lo que ha contado Pérez Martín es clarificador porque tras pedir la subvención, en sucesivas reuniones en el despacho de Guerrero y responsables del Instituto de Fomento de Andalucía, le exigieron que diera de alta a una nueva sociedad, algo que no tiene sentido en unos fondos que se destinan a empresas ya constituidas y en crisis. La nueva empresa fue Andalucine SL. Posteriormente, a finales de 2003 el exalto cargo de Empleo, Guerrero, y el exdirector general del IFA, Francisco Mencía, plasmaron la ayuda en un convenio. El dinero se abonó en dos pagos: 100.000 euros en abril de 2004 y 110.354 euros tres meses después.

La inversión se capitalizó y se traspasó todo el personal a Andalucine SL. Como administrador solidario hasta julio de 2007 aparecía su padre, Emilio Pérez Ruiz, diputado del PSA en las primeras elecciones de la democracia.

Producciones Barataria SL fue fundada a finales de 1996 por Pérez Ruiz, que se convirtió a mediados de los noventa en el abogado de Juan Guerra, hermano del expresidente del Gobierno, en un pleito con Hacienda por un delito fiscal. En 2007 Beatriz Pérez Martín amplía el negocio con una nueva sociedad, Film Location Store.

Según Beatriz Pérez, su hermana —delegada de Medio Ambiente de la Junta en Sevilla hasta 2010— no conocía a Javier \[Guerrero \] y no tuvo nada que ver con el tema.

Hay que recordar que en el caso Camas, la entonces delegada provincial de la Consejería de Medio Ambiente en Sevilla, Pilar Pérez Martín, su hermana Beatriz y el padre de ambas, Emilio Pérez Ruiz, lograron una plusvalía de 4.320 millones de pesetas (unos 26 millones de euros) en un solo día por la compra y posterior venta de unos terrenos que el PSOE se comprometió luego a recalificar. La llegada de IU a la Alcaldía de Camas, en 2003, frustró la operación y la Caja San Femando, que había concedido los créditos a los últimos compradores. acabó asumiendo las hipotecas una vez que el pelotazo ya se había consumado.

Pues bien los terrenos fueron vendidos a Hispalia XXI y a Desarrollo Inmobiliario Siglo XXI por 5.220 millones de pesetas (4.500 más IVA). Estas dos empresas las constituyeron las sociedades Coinsur 99, de Gerardo Martínez Retamero (47,12%), Caja San Fernando (32,10%) y la inmobiliaria Reifs (20,36%), la constructora de la residencia de ancianos Juan Zarrías, padre de Gaspar Zarrías, en Cazalilla.

Se trataba de la finca Los Hallones, 90,42 hectáreas de suelo inundable en el término de Camas que, en la mañana del 23 de septiembre de 2000, pasó de unas manos a otras, dejando por el camino un beneficio de 1.320 millones de pesetas para Pérez Ruiz y la empresa Sol Frío de Níjar, de la que cada una de sus dos hijas poseía, aproximadamente, un tercio. Cuando Emilio Pérez Ruiz y Sol Frío de Nijar llevaron a término la operación, Pilar Pérez Martín era directora del área de Juventud de la Diputación de Sevilla, un cargo de libre designación.

El presidente de la Diputación en aquellos momentos era Luis Navarrete, que por esas fechas era, además, concejal del PSOE en Camas. Navarrete ha sido desde agosto de 2004 hasta la aparición de Cajasol, el presidente de la Caja San Femando.

Al incorporarse a la Consejería de Medio Ambiente, como delegada provincial en Sevilla, Pilar Pérez Martín declaró poseer 1.000 euros en acciones de Sol Frío de Nijar.

Emilio Pérez Ruiz aseguró entonces que fue él quien dirigió la operación y que la presencia de sus dos hijas en la sociedad Sol Frío de Níjar fue irrelevante. Negó que Pilar ejerciera influencia alguna y, a este respecto, puntualizó que él mismo tenía, por aquellas fechas, más relevancia política que su hija. Pérez Ruiz dijo que «el único que ha movido ahí las voluntades hacia un proyecto de desarrollo urbanistico [al final frustrado] he sido yo. Mi hija no tuvo influencia ni la pudo haber tenido, porque no era nadie».