RECUERDOS I...

Noche Blanca
Noche blanca de desvelo noche de pensar profundo,
noche que pones un velo a mi fe en este mundo.
Esperanza marchitada en las bondades ajenas,
esperanza deshojada que a mi pecho le da pena.
Temor a la alborada que presiento gris y parda
temor por el nuevo día que roba la paz del alma.
Sueño que de mí escapas vuelve por este sendero
que quiero soñar con ella y su cara que venero.
Traeme su risa loca, traeme su boca hermosa,
traeme su bello cuerpo y su carita de rosa.
En esta blancura oscura que me envuelve pavorosa,
me da miedo de locura el no tener a mi hermosa.
El silencio turbador de esta noche veraniega
me sofoca su calor y su blancura me ciega.
La triste ausencia añorada de mi morena de fuego,
es la imagen de mi amada sin acudir a mis ruegos.
Tenebrosa compañera, noche blanca de mi vida,
haz que llegue la mañana con su luz amanecida.
Termina noche blanca haz que pasen las horas
y que a mi bella amada encuentre con la aurora.

Muy bonita Antonio, me alegro de verte aquí.
Buen venido al taller.

Decidme cómo es un árbol,
contadme el canto de un río
cuando se cubre de pájaros,
habladme del mar,
habladme del olor ancho del campo
de las estrellas, del aire.

Recitadme un horizonte sin cerradura
y sin llave como la choza de un pobre,
decidme cómo es el beso de una mujer,
dadme el nombre del amor
no lo recuerdo.

¿Aún las noches se perfuman de enamorados
tiemblos de pasión bajo la luna
o solo queda esta fosa,
la luz de una cerradura
y la canción de mi rosa?

22 años, ya olvidé
la dimensión de las cosas,
su olor, su aroma,
escribo a tientas el mar,
el campo, el bosque, digo bosque
y he perdido la geometría del árbol.

Hablo por hablar asuntos
que los años me olvidaron.

No puedo seguir:
escucho los pasos del funcionario.

Mi corazón es patio

La tierra no es redonda:
es un patio cuadrado
donde los hombres giran
bajo un cielo de estaño.

Soñé que el mundo era
un redondo espectáculo
envuelto por el cielo,
con ciudades y campos
en paz, con trigo y besos,
con ríos, montes y anchos
mares donde navegan
corazones y barcos.

Pero el mundo es un patio
(Un patio donde giran
los hombres sin espacio)

A veces, cuando subo
a mi ventana, palpo
con mis ojos la vida
de luz que voy soñando.
y entonces, digo: “El mundo
es algo más que el patio
y estas losas terribles
donde me voy gastando”.

Y oigo colinas libres,
voces entre los álamos,
la charla azul del río
que ciñe mi cadalso.

“Es la vida”, me dicen
los aromas, el canto
rojo de los jilgueros,
la música en el vaso
blanco y azul del día,
la risa de un muchacho…

Pero soñar es despierto
(mi reja es el costado
de un sueño
que da al campo)

Amanezco, y ya todo
-fuera del sueño- es patio:
un patio donde giran
los hombres sin espacio.

¡Hace ya tantos siglos
que nací emparedado,
que me olvidé del mundo,
de cómo canta el árbol,
de la pasión que enciende
el amor en los labios,
de si hay puertas sin llaves
y otras manos sin clavos!

Yo ya creo que todo
-fuera del sueño- es patio.
(Un patio bajo un cielo
de fosa, desgarrado,
que acuchillan y acotan
muros y pararrayos).

Ya ni el sueño me lleva
hacia mis libres años.
Ya todo, todo, todo,
-hasta en el sueño- es patio.

Un patio donde gira
mi corazón, clavado;
mi corazón, desnudo;
mi corazón, clamando;
mi corazón, que tiene
la forma gris de un patio.
(Un patio donde giran
los hombres sin descanso)

Poemas de marcos Ana que estuvo preso del regimen franquista desde os 18 a los 40 años y tres veces condenado a muerte.
Enviado por Antonio Peña Ventura el 02/08/2018

El estar preso durante el régimen franquista, es lo de menos. Franco y los suyos arrestaban por cualquier atisbo comunista y te metían preso. Ahora bien, ¿por qué fue condenado tres veces a muerte?

Por escribir en contra del regimen, por pertenecer al partido comunista, los jueces de entonces lo sabrán allá en el infierno. hasta hace poco viví con 94 años y daba conferencias sobre poesía donde se incluía la política por toda España. Hay un video en Youtube donde cuenta su vida.

Por ser comunista es cierto que era perseguido, él y todos de la izquierda. Pero hay algo que no nombra, hay que contarlo todo, no vale una parte, ha de ser íntegra. Cierto que estuvo condenado a muerte tres veces, pero... ¿Por qué?

RECUERDOS I
No son los Recuerdos de niñez, de mi paisano Machado, pero a veces buscando en los meandros de la memoria, uno encuentra retazos del pasado que creía perdidos para siempre. Por empezar diré que no tengo ningún recuerdo de mi primera niñez de la ciudad en que nací, Sevilla. Los más antiguos son de Málaga, de un anciano que como niño de 4 a 6 años veía como un formidable gigante. El reunía a un grupo de chiquillos y les hablaba del cercano Monte Coronado o de su pasado militar. Otros son la visión de unas lagunas secas de las que solo quedaban la ondonada y sus paredes blancas como la sal. Los locos del manicomio cercano a mi casa asomados a la tapia que los separaba del mundo pidiendo pitillos o perras a los transeuntes. El puente de Armiñán que ciertamente no sé si era por encima del Río Guadalmedina o algún arroyo. La imagén de mi padre volviendo del trabajo y la eterna pregunta mientras cruzaba la Plaza Eduardo Dato: ¿Papá, traes algo? La mayor parte de esas veces aparecía un paquetito de merengues que pronto serían engullidos. La playa y un trén de carga que cuando hacía sonar su silbato invariablemente me hacía llorar desesperadamente. El mismo llanto cada vez que escuchaba el tango Madrecita. Por supuesto que en ese tiempo no sabía que había existido Gardel ni que existía ARGENTINA y el recuerdo más vívido el de una escapada con un primo de mi edad desde mi casa a la suya, cruzando el citado puente Armiñán. Creo que todavía resuena en mi mente la regañina de mi madre por la inocente aventura.
(Esto seguramente les interesará muy poco a los amigos pero es como un descargo de la memoria).