EN PRIMERA FILA....

EN PRIMERA FILA.

Cien días sin Gobierno.

El Rey no ha podido estar más acertado: España lo aguanta todo pero un día puede dejar de hacerlo.

Ana I. Sánchez.

Actualizado:

06/08/2019 07:50h.

Hoy se cumplen 100 días desde las últimas elecciones. Y ni España tiene Ejecutivo ni puede asegurarse que vaya a tenerlo pronto. Tampoco tarde. La incertidumbre sobre lo que pasará en las próximas semanas es absoluta pero el verano abre un paréntesis y, ahora mismo, en lo que están pensando los líderes políticos es en sus vacaciones. Dos campañas electorales seguidas les han dejado agotados y hay que recuperar fuerzas. A la vuelta estudiarán cómo ha evolucionado la opinión de los españoles y tomarán sus decisiones. En política, los casi dos meses de plazo que aún quedan para que se convoquen elecciones es mucho tiempo. España lo aguanta todo.

Este verano volveremos a vivir la situación política como si estuviéramos en un bucle. Ya llevamos varios años así. Los españoles que se fueron de vacaciones en junio o julio sin Ejecutivo, sin saber quién iba a pactar con quién, se han encontrado a la vuelta que el debate sigue siendo el mismo. Lo único que se han perdido es el vodevil protagonizado por Pedro Sánchez y Pablo Iglesias en el Congreso y los días previos al debate. Los españoles que se vayan ahora a descansar se encontrarán a la vuelta, muy probablemente, con que la situación sigue igual. España lo aguanta todo.

¿Dónde están todas esas urgencias que obligaban al Gobierno socialista a aprobar decretos sin parar antes de las elecciones? ¿Han desaparecido acaso la pobreza, el paro, la precariedad laboral y la emigración al exterior que tanto PSOE como Podemos denunciaban cada día cuando gobernaba Mariano Rajoy? Desde luego, no dicen eso los indicadores. Más bien, apuntan a una ralentización que puede agravar todas estas cuestiones y para la que el Ejecutivo socialista no está preparando al país porque ¿cómo iba a hacerlo? Está en funciones. Tenemos cada día más cerca un posible Brexit sin acuerdo, suficiente por sí solo para meternos en un ajuste económico aún difícil de cuantificar. Y estamos viendo cómo la guerra comercial entre Estados Unidos y China no solo no amaina sino que se recrudece. Una pugna que, si no se distiende, puede llevar a la economía mundial de cabeza a una nueva crisis. Pero tampoco nada de esto es aliciente suficiente para desbloquear el Gobierno. España lo aguanta todo.

El colmo de esta desidia es que con una amenaza yihadista elevada y un riesgo «alto» de ataque terrorista, al Gobierno socialista le sirva con tener la jefatura del CNI en situación de interinidad. Obcecado en sacar medidas electoralistas durante las últimas semanas de legislatura, el Ejecutivo de Sánchez no calibró que Félix Sanz Roldán llegaría al final de su mandato el 5 de julio, sin posibilidad de prórroga después de diez años, y que no podría nombrar a su sustituto si para entonces estaba en funciones. Es lo que ha sucedido, como era evidente, con cinco partidos en liza por alcanzar La Moncloa. Ahora mismo no hay director del CNI y las funciones de Sanz Roldán han caído temporalmente y de manera interina en la secretaría general del organismo, Paz Esteban. Cuando con este panorama los socialistas se quejan de que se cuestione su esfuerzo, «no digáis que no trabajamos, que no es justo», una no sabe si reír o llorar. El Rey no ha podido estar más acertado al decir lo que todos los españoles piensan: los políticos deben buscar una solución antes de pedirle a los ciudadanos que voten otra vez, solo porque no les gusta el resultado. Porque ya saben, España lo aguanta todo... pero un día puede dejar de hacerlo.

Ana I. Sánchez.

Corresponsal.